
Mamá Noel no se acostumbra a mis carícias. Cada vez que ve asomarse el guante ataca con fiereza. Ten un hijo pa esto.
No llegaré a final de mes si sigo gastando a este ritmo de princesa sin reino. Se acabaron los caprichos. Quien me quiera ver que venga a mi casa que yo no tengo ni pa una T10.
Llevo tres horas leyendo informes de Negocios... y las olvidaré en los próximos minutos a pesar de todo el tiempo malgastado intentado memorizar lo leído. Paul, ten piedad mañana...
Los bolos deberían estar considerados deporte de los JJ. OO. ¡Qué agujetas en muslos y brazos! Le debo un polvo a Manolo y me debo uno a mí misma que esta mañana no podía con mi alma y me he quedado en el simple pensamiento... Volviendo a la idea base: Co, quiero la revancha, a todo o nada. La primera partida era de calentamiento y la segunda... ¡me temblaba hasta la mediana! A nadie le gusta ganar así... Antes del jueves, en cuanto me recupere físicamente, te reto a otra partida y esta vez... prepárate.
He dormido casi diez horas. Esto no es sano. Todos sabemos que el sueño no se recupera, vaya, que puedes estar dos días sin pegar ojo y si al tercero sobas 12 horas ¡¡sólo tienes más sueño!!
Empiezo a notarme nerviosa. El ratón se ha despertado y, siguiendo su ciclo vital, empieza el día para él. Lo he cogido sin guantes y me ha pegado un mordisco con todas sus ganas. Resultado: tengo otro moratón de la leche que me he dado sacando la mano a velocidad ultrasónica.
Ya estoy con la impaciencia. Querría saber si este bicho me considerará no enemigo en algún momento, si podré conocer sus manías y él las mías, si me dará las gracias por pelarle cuatro pipas... L´amour. O lo que sea.

No hay comentarios:
Publicar un comentario