miércoles, 12 de diciembre de 2007

ESPINAS


Cené salmón con El mundo de Millás. Cargada de ánimos y raspas a partes iguales empecé a pensarme en sirena y no me gustó ni un poquito. Engullí los trozos más jugosos y acabé el libro quitando las espinas oportunas de cada página, sin desesperarme demasiado, degustando el final del mismo.

Digo cené y no he cenado. Faltan unos cuantos tic y otros tantos tac para el final del día pero lo he acelerado en mi cabeza. Me quiero meter en la cama –con la sábana polar que se ha descompuesto y ya no me abriga los pies- con buen sabor de boca.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tu blog me parece acojonante. Lo descubrí hace 3 días y me he quedado pillado con la forma tan mágica que tienes de escribir.
yo te invito a que pases por el mío, mucho más burdo y banal que el tuyo, pero tiene su gracia.
http://www.rubendiario.blogspot.com/
Un saludo,

Rubén S.