lunes, 5 de octubre de 2009

OXITOCINA

El tamaño importa. Y la forma también.

No siento pánico frente a un trocito de papel que rellenar y, si tiene forma irregular, como cuando arrancamor un cacho de algún periódico, por ejemplo, tengo la necesidad de adaptar la longitud de las frases al espacio disponible.



Esa soplapollez pensaba esta mañana, disfrutando de la visión de mi montañita de kleenex, cuando ha sonado el teléfono y la jefa me ha dicho que había una compañera enferma a la que suplantar rápidamente.


- Necesito una madre... ¿me tocas la frente a ver si tengo fiebre?

- Nada de nada, - ha dicho Lily- serán las hormonas.

- Te hace falta un buen meneo...

- Mimitos, necesitas mimos... Tienes bajo el nivel de oxitocina.

- ¿Eso es grave?

- ¡Qué va, mujer! ¡Eso es que estás viva! Pero un poco sola...

- Ya... pero es que me encuentro fatal.. Tengo muchísimo calor...

- Eso es otra historia, no te pienses... Calor, hoy, tenemos todos.

- No te lo tomes a mal pero... los escotes que llevas y el aire acondicionado son una mala combinación. Igual te soluciona lo de la oxitocina pero el resfriado, más pronto que tarde, caerá. Ya lo verás.



Pues nada. Con calor pero sin fiebre, sin oxitocina en piel pero respirando y sin tocamientos de ningún tipo.

Sopita caliente y andando.

No hay comentarios: