sábado, 24 de noviembre de 2007

MORRIÑA

La morriña aparece en cualquier momento. No hablo de la modorra catalana sino de la sensación de nostalgia que huele a tierra mojada, a casa, a gestos familiares repetidos, a fotos de cuando éramos chiquis y no queríamos. Se estaba bien entonces. Mejor de lo que pensaba.
Esta mañana me he despertado y han sucedido dos cosas. La primera es que he escuchado cómo alguien preparaba café. Metódicamente. Giro de la tapa, cuchara que adivino hundiéndose para luego volcarse en la taza, dos golpecitos secos para vaciarla del todo, tapa que se gira y choque entre los otros botes de la repisa. Y me he acordado del ruido de mi madre por las mañanas haciéndose el café, yendo al lavabo con el primer cigarro del día, y vuelta a la cocina a preparar nuestros colacaos.

- Jodeerr, te he dicho que no lo muevas, que me gustan los grumos
- Vete a la mierda, has tardado tanto en ducharte que se ha puesto así. Tonta.
Después hay quien se pregunta de dónde he sacado eso de hablar soltando tacos desde el cariño.

La segunda es que la alarma ha sonado por tercera vez y yo estaba con los ojos puestos en el azul de la pared hasta que me he dado cuenta de que estaba en mi habitación. A la cuarta vez que ha
chirriado el móvil me he girado buscando tu espalda y me he encontrado con el respirar fuerte de una fémina amiga. Choff. Es viernes, llego tarde, tengo que poner un examen, no me da tiempo a ducharme, vamos a terminar a lo grande la semana. Todavía puede empeorar. Vamos allá, a ver si lo consigues. En el metro no era la única que no había pasado por el baño y era tal el calor, la asfixia, que he desistido de mi intento de cogerme a alguna barra y he cerrado los ojos.

- ¿Te imaginas dentro de 10 años?
- Sí, tía, en el 2000 tendremos 21 años y cogeremos el metro todos los días para ir a la uni y a trabajar y cuando volvamos a casa estará nuestro churri haciendo la cena
- Y veremos la tele comentando el día
- Sí, y nos dormiremos en el sofá
- Buah, yo pienso tener la casa llena de mantas para los sofás
- Yo también y mi novio será músico y tocará la guitarra o el piano y cantará para que me duerma y me hará el desayuno los fines de semana
- Y tendremos un perro

Susana, fan de los New Kids on the Block, un domingo tarde cualquiera. Quién iba a suponer que, a estas alturas (en dos días 28) la realidad iba a ser tan diferente. Un piso -compra o alquiler- se llevaría el total de mi sueldo. Vivir sola es una utopía y empieza a serlo para dos también. Necesitas tener un contrato decente, un aval, unos 8000 leuros iniciales, mucha suerte y toneladas de paciencia. Lo de las mantas sí lo he cumplido, yo que no tengo ni sofá. Lo del churri haciendo la cena es más de Sensación de Vivir o peli de Antena 3 el domingo por la tarde y se hizo evidente pronto . Yo tampoco tengo el pepe para farolillos. Y lo del perro... Con lo que cuesta el pan, la leche y los demás alimentos de primera necesidad, con lo que arrastro los pies últimamente, con lo poquito que me cuido, con los pocos momentos en los que consigo dejar de tener la mandíbula en tensión, con todo lo que tengo que esforzarme por ser persona no ladradora sino perrillo echando cabezadas...

Gracias por adelantado por el salmón con jamón al horno.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Morriña en mallorquin es pasar pena, en castellano melancolía ( o nostalgia?) y en italiano penossità,
¿cuál es la tuya?