miércoles, 2 de noviembre de 2011

Dejarse la piel




La viñeta está sacada de www.transgordos.blogspot.com.


¿Qué pasa antes? ¿Qué pasa después? ¿Por qué todo así de sanguinolento?


Para dejarse la piel, hacen falta unos andares más cansados luego. Para decirlo, hay que haber rascado mucho, hasta casi hueso. Para acabar sin piel, tienes que haberte arrastrado mucho (como cuando de chicos nos dejábamos, día tras día, las rodillas en el patio), haberlo ofrecido todo, haber sufrido demasiado, haber sudado casi la vida entera. Para caminar sin piel, claro, es necesario aceptarlo antes porque, si no te olvidas del dolor, si no haces de tripas corazón, no hay manera de dar un puto paso.

- Buenas noches, señorita. Tengo una consulta, ¿para ser feliz sin piel....?
- Disculpe, por "ser feliz sin piel" no me sale nada.
- Vaya... Y, ¿por "ser feliz", a secas?
- Un momento, por favor. Disculpe, vamos a procesar su consulta. Hemos detectado una bajada en la conectividad y es probable que, debido a esta situación momentánea, nuestras líneas no tengan respuestas a su consulta. Si lo desea puede permanecer a la espera o realizar otra llamada en unos minutos, cuando se haya solucionado la incidencia.
- .... La incidencia, ya... Bueno, es que yo busco mi piel... ¿podría facilitarme algún número?
- Lo lamento mucho pero no puedo darle esta información. Si quiere puedo pasarle con el servicio de consultas o con el de emergencias.


Me voy a hacer un caldito con mi codo. Hay que sacarle partido al "jamonismo", y a la piel propia.






Venga, hasta luego, te llamo....

3 comentarios:

mil dijo...

Se podría seguir la conversación con cualquier compañía de teléfonos hasta quedarse sin respuestas, sin extremidades y sin piel.

Anónimo dijo...

Más por favor!

Anónimo dijo...

¡Más por favor!