domingo, 23 de mayo de 2010

COSMOPOLITA

La rutina de los domingos se resume así:

- levantarse pronto y trasladar el cuerpo de la cama al sofá.
- desayunar leche, fruta, pan y cereales.
- dormitar viendo las noticias 24 horas o cualquier serie ñoña tipo Felicity o Sirenas.
- desayunar por segunda vez en la terraza del Cosmopolita leyendo el periódico.
- acabar los crucigramas en mi terraza, con el sol llegando desde la izquierda, con un partido de basket, una carrera de F1 o de moto GP de fondo.

Si las condiciones previas se cumplen difícilmente será un mal domingo. Poco importa lo que pase después; no afecta demasiado. No será un mal domingo. Tampoco he dicho que eso lo convierta en domingo memorable. Sería un domingo más, de los que paso a miles, en los que prima la intención de estar en calma. Tampoco he dicho que así consiga tener tranquilidad.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Qué divertido!!! Me has hecho reír!! Jajajja!!! Grande!!