sábado, 27 de abril de 2013

lunes, 15 de abril de 2013

IAN RISTEANDO


Aquí andamos, nene, risteando un poco y acordándome de ti. Risteando, de leer a Risto Mejide, de en el proceso, vaya. Nada, no te quito ni un minuto más de atención y copio el texto, que es lo importante. Lee poquito a poco, masticando bien, no te me vayas a atragantar con tanta letra y tanta verdad. Una última cosa: no estoy de acuerdo con todo y me encantará discutirlo contigo cuando te salga de piiiiiiiiiiiiiiiiiiii
Alé, bonico, anda por lo segao.


Lo poco que sé de la vida

Lo poco que sé de la vida está en los libros que nunca leo. Lo poco que sé de la vida está en las líneas que no escribí. Lo poco que sé de la vida se cuenta tomando un café, se entiende tomando una copa y se olvida tomando dos.

Que nadie se me emocione ni albergue falsas esperanzas, porque con lo poco que sé de la vida, a duras penas se llena un corazón, por pequeño que sea. Sí, sobrino, va por vos.

Empiezo por lo que sé con toda seguridad. Sé que, con suerte, te vas a morir una vez. Así que procura no morirte más veces por el camino. No hay nada peor que esa gente que se va muriendo antes de morirse del todo. Para evitarlo, te regalo un método infalible. Mientras tú vayas decidiendo, todo está bien. El día que dejes de decidir, ese día, cuidado, porque la habrás palmado un poco.

Ten siempre más proyectos que recuerdos, es la única forma que conozco de mantenerse joven. Olvídate de la patraña esa de ser feliz, ya te puedes dar con un canto en los dientes si llegas a ser el único dueño de tus propias expectativas.

Que un euro se ahorra, y un polvo se pierde. Para siempre. Que hay que dedicarse a algo de lo que jamás te quieras jubilar. Por mucho que te cueste pagar las facturas. Por mucho que en las reuniones de antiguos alumnos te miren mal. Es mejor dedicarse toda una vida a algo que te divierte pese a no llegar a fin de mes, que pasarte un solo día trabajando únicamente por dinero.

Entre lo poco que sé de la vida, también te diré que nada de todo esto vale la pena sin alguien que te haga ser incoherente. Ni flores, ni velas, ni luz de luna. Ése es el verdadero romanticismo. Alguien que llegue, te empuje a hacer cosas de las que jamás te creíste capaz y que arrase de un plumazo con tus principios, tus valores, tus yo nunca, tus yo qué va.

Ojalá ames mucho y muy bueno, incluso a riesgo de ser correspondido. Que te despojen de todo, que hagan jirones de tus ganas y que te veas obligado a remendarlas con el hilo de cualquier otra ilusión. Que desees y seas deseado, que se frustren todas tus esperanzas y que acabes descubriendo que la única forma de recobrar el primer amor, que es el propio, es en brazos ajenos.

Dos emociones inútiles asociadas al pasado, arrepentimiento y culpa, y una emoción inútil asociada al futuro, la preocupación. Cuanto antes te desprendas de las tres, antes empezarás a apreciar lo único que tienes.

Qué más. Ah sí. Sé que al menos un amigo te va a traicionar, otro será traicionado por ti, y que te pongas como te pongas, los que no hayas hecho antes de los 30, ya jamás pasarán de buenos conocidos. Cuenta sólo con los tres principales, porque a partir de ahí, todo es mentira.

Para terminar, y hablando del tema, déjame que te presente a tu mejor enemigo. Se llama miedo. Quédate con su cara, porque va a estar jodiéndote de ahora en adelante. Miedo al fracaso. Miedo al qué dirán. Miedo a perder lo que tienes. Miedo a conseguirlo. Miedo a saber poco de la vida. Miedo a tener razón.

                                                                                                                     Risto Mejide, Hartículos

miércoles, 3 de abril de 2013

MICA y HACIENDA 2012




Ouuuu yeahhh!! Ha llegado el momento!!! Tatachááááán!!!! Ya está aquí... ¡¡¡La Renta 2012!!!

Qué momentazo, amigos,¡¡qué gran noche nos espera!!

Tecleo los datos correspondientes. Llamo a mi madre para que me dé los que no tengo y que ella atesora. Completo online todos los campos necesarios. Cruzo los dedos.

... Atención, sí, nos confirman que el número premiado en esta Renta 2012 es el... ¡¡¡ 1.643!!!

Me voy a DEVOLVER un rato. Luego volveré y me enfadaré muy fuerte.

Puta perra vida.
Me toca a pagar.
Otra vez.
Mil seiscientos y pico euros.
Me cago en todo.
Me cago en mi vida.
Blasfemo por teléfono con mis familiares. Mi padre se niega a prestarme la escopeta unos diítas, puto traidor.

"En positivo, en positivo... no te pierdas, no gastes energías que mañana vuelves a currar de once a siete..." me dice mi voz en off, "..piensa rápido a ver cómo te lo montas para pagar la puta mierda de Hacienda Semos Todos... piensa piensa piensa piensa piensa piensa piensa piensa piensa piensa" Entro en loop, sí, confirmado. Me doy cuenta cuando ya tengo el colmillo atravesándome el labio inferior. Una cosa lleva a otra: "Acuérdate de lo que dijo Arturo, ni se te ocurra sacarte las muelas del juicio... las necesitarás cuando seas una vieja pobre y quieras jalar algo que no sea líquido" Me da la risa floja -carcajada a buen volumen, sola en mi habitación-, locurón máximo, y me entretengo pensando cómo sacar pasta y apoquinar.

1. Ir al Meeting Point y extender la mano al tiempo que recito algo así como: "Iiiiio sooono una profesora miserabile e debo pagar a la Hasienda per favor, una aiiiuuuda... siñore y siñora... por favor..." Nota mental 1: llevar una copia de la declaración de la Renta 2011 en el bolsillo para que, sólo palparla, el lloriqueo me salga natural. Nota mental 2: pringá, te vale casi cualquiera de la declaraciones anteriores. Nota mental 3: es que Hacienda me tiene manía.

2. Colgar de estado en el Caralibro: "Dame un leuro, payo, que tú tienes parné... un leurito solo... // Give me an euro, guiri... you have money, just one euro.." Adjuntar mi número de cuenta bancaria. Traducirlo a todos los idiomas posibles.

3. Comprarme una guitarra y un sombrero de copa. Empezar a explicar el contraste de pasados cantando mientras paseo entre mis estudiantes. Cuando les sangren las orejas (al segundo acorde) pasar el sombrerito. Repetir la operación cada día, en cada clase.

4. ¿A cuánto está el kilo de óvulos?

5. Clases de español a domicilio con Happy End. Petando el mercado.

6. Clases de español online amenizadas con baile exótico ("La sardana final").

7. Enviar una foto a mis padres de mí misma con un buen matojo de pelos en la boca. Guasap con el texto: "Que estoy muy loca, o me dais la pasta o me corto el pelo a mordiscos".

8. Callejear y asaltar a turistas. Metérmelos en el bolsillo. Hacerles una rutilla por los rincones de la ciudad que salgan al paso. Pedirles la voluntad. Repetir la estrategia cada noche al salir del curro de camino a casa.

9. Llevar el lema "Yo he venido aquí a hablar de mi libro" a sus cotas más altas. Cobrar 1 leuro por pregunta estúpida, por pregunta que no viene al caso, por interrupción innecesaria, por repetición de la explicación, por no traer los deberes... De ahí creo que sacamos un buen bote gracioso para todos los profes que estén en la misma situación.

10. A completar libremente: ___________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________________



Oye, que dice mi madre que le dé a ella 50 eurillos cada mes y así el próximo abril, cuando vuelva a tocarme a pagar, será menos... "¡Este año serían sólo 1000!" me suelta emocionadísima. Tócate los huevos. SÓLO 1000.... Tengo que interpelar, aunque no sirva de nada: "Buah, si es que eso no es nadaaaa... es que son ganas de cabrearme como una mona (o como una MICA, en catalán) y blasfemar porque sí.... si lo mismo, un poner, rebuscando en los bolsillos de los pantalones y las chaquetas, con lo que encuentre de calderilla, ya me llega... ¿que no?" Me prohíbe llamar al gestor, que ya mañana se pasa ella a hablar con él, que no quiere pasar vergüenza como las otras veces, que parece mentira que no me entre que el hombre no tiene la culpa, con lo afable que es... "Te cobra 60 eurazos cada vez que vas con mi declaración así que, como poco, tiene que atenderme pacientemente por teléfono y explicarme de otra manera por qué cojones yo tengo que pagar cuando no tengo un puto garbanzo y NO, no me sirve que me diga eso de que, como no tengo nada, ni piso ni casa ni coche ni putas, no puedo desgravarme... que NO- LO- ENTIENDO y se lo he dicho ya muchas veces, me cago en la puta, que no tengo porque no puedo tener, que no os queda claro, joder, que sólo te falta decir que siempre saludaba el muy hijo de puta..." Un saludo desde aquí, también, a las compañías de telefonía que hacen el agosto este mes, os lo digo. Están compinchados segurísimo. No me llegan los minutos "gratis" (¡JA!) de mi tarifa de mierda para rajar todo lo que me pide el cuerpo. El mes que viene, cuando me llegue la factura, les enviaré este mail:

"Payos,

yo no tengo un duro, hablad con los de Hacienda que os están haciendo la púa y se lo han quedado todo.

Alé, a tope con la conectividad,

Mica."



Hiperventilo menos ya, no preocuparse que este año invito yo.

martes, 2 de abril de 2013

IAN, ATENTO


Niño Mofletes, pequeño Cachalote, bienvenido otra vez.... ¿Listo?
¿Ya?
Va, que empezamos.

Esto va de cuando está nublado, grisísimo, y uno espera que llueva ya, que truene, que se desate la tormenta del siglo y no pasa nada.... absolutamente nada. Esto va de cuando uno se pone a pensar en lo peor, ni siquiera a pensar, sólo se pone en lo peor, y no cae ni gota, ni un jodido chirimiri. Esto va de cuando lo ves negrísimo y, voilá, arcoiris al canto que te crió, solazo, verano en abril, tirantitos, vermú....

Qué rica la vida, Ian, qué gustosa.... si le das tiempo, si pones atención, si no te emperras en seguir el puto camino de miguitas que marca la lectura de Hansel y Gretel.... Si hubieras estado recogiendo pan, te hubieras perdido este atardecer.... Y lo de ignorar atardeceres lo llevamos de serie, no les echamos cuentas a no ser que sea domingo y te pille bostezando en casa.


Me han venido a la mente atardeceres ajenos: un tipo cronometrando el momento en el que, oficialmente, se consideraba atardecer el cambio lumínico y que ponía una señal en su libretita de miserias, otro churri que sacaba la cámara y se flipaba con los zooms y los píxeles y las mandangas, otro pavo que se ponía de espaldas en plan vampiro cutrón... Y así. Lamentable en general.


¿Por qué esa gente actuaba así? Por las putas películas, Ian, que te lo tengo dicho. Que no aprendemos así sin más, Niñobúho, que somos animales de costumbres. Todo el mundo tiene su película mental, hasta el que te repite por enésima vez que está perdido y que no sabe dónde anda. Repetimos esquemas, argumentos, guiones... y no somos originales ni una pizca. Si la peli me gustó, ¿para qué voy a cambiar nada? Esa gente que te suelta "A mí, "El Señor de los Anillos" me moló por sus efectos especiales" Ah, muy bien, ¿tú qué eres, el puto pringado que se pasa horas jugando con el Photoshop? ¿están orgullosos en tu casa? ¿tu madre entró en el Libro Récord de los Guiness cuando te parió?  Ahí vamos, la peli te gustó pero no sabes por qué ni para qué ni si es la tuya y te ves de prota o de extra o de director....

A ver... te voy a dar unas instrucciones muy básicas y muy firmes. No me mires así. Piensa que es una especie de juego. Venga, no le des más vueltas.

- Vete al baño. Ponte enfrente del espejo. Acércate bien. Mírate a los ojos. Tienes que estar muy cerca, las pupilas abiertas al máximo.
- Sepárate del espejo POCO A POCO.
- Tócate la frente. ¿Tienes más de dos dedos?
- Tócate las cejas. Masajéate un poquito con el pulgar y el índice. Insiste donde duela.
- Tócate los ojos. Empieza por los párpados, sólo con las yemas de los dedos, luego pestañas, sienes y ojeras futuribles.
- ¿Qué tal un poco de nariz? ¿Cuántos dedos te caben? ¿Qué medida tienes?
- Pellízcate los mofletes. Observa cómo cambian de color.
- A mí, la boca me mide siete dedos. Nueve si la abro. ¿Lo superas?
- Saca la lengua. Sácate la lengua. Hazte gañotas. Mírate, qué carotas, Ian. :)
- ¿Sabes que hay lugares en los que para decir "no" mueven de arriba a abajo la cabeza? Prueba, prueba, ya verás que no es tan fácil como parece.


Vale, ya casi estamos. Tócate un poco, donde te rote, donde puedas, como quieras.

¿Sí?

Se me ha pasado el atardecer escribiéndote, Ian, ¿cómo lo ves? Seguro que hay quien blasfema y me llama lo peor por sudar mil de echarle un ojo al mundo de más allá de la ventana.. A mí, flis. Me la pela taaaaanto...

Si eres un tipo A de persona, se te habrá quedado mal cuerpo porque habrás seguido las instrucciones una tras otra y el final no es lo que esperabas, el Happy End de los cuentos.

Si eres un tipo B de persona, habrás llegado hasta aquí maldiciendo en voz alta porque estás en contra de toda norma establecida y, justo por eso, haces lo contrario. Y justo por eso haces lo que un tipo B cualquiera haría.

Si eres un tipo C de persona habrás empezado a leer sospechando que algo misterioso y especial estaba por llegar, una suerte de revelación divina que te daría la llave para triunfar en la vida, para ser FELIZ siempre, con mayúsculas.... Si es así... o yo he palmado pronto o tú no eres muy consciente de los genes que tienes y de lo poquito o nada que tiene que ver la vida con los cuentos infantiles.

Si eres un tipo de persona D, habrás releído lo anterior un par de veces como poco, sonriendo por lo bajo, torciendo el gesto en alguna palabra, habrás intentado adivinar el final del post como si hubiera premio si aciertas, te habrás puesto algo de música llegado a este punto -especial para este momento-, habrás dado al pause varias veces para leer en voz alta y que te llegue bien el mensaje, con sus pausas medidas, con sus cosas no dichas pero entrevistas.

No hay letra ganadora. Zasca al A y al B. Dudar está muy bien pero no te asegura el siempre ni el ahora. Zasca al C y al D.

¿Tenemos una sorpresa? Qué me encantan las sorpresas...


Mira que el abecedario es largo, ¿verdad? Y nos quedamos ahí, como si con cuatro letras pudiéramos ganar al Apalabrados de paliza. En fin, que la chuminada de las instrucciones no te ha podido hacer daño de ninguna de las maneras así que, si ése es el punto principal de tus reniegos y tus cabreos de ahora mismo... quejarse de vicio, lo llamamos en el 2013.







Onacelbar


En Onacelbar, donde vivo, los edificios se inclinan al atardecer y aparecen los arcoiris sin dar explicaciones, cuando les apetece. Faltaría más.